Inteligencia Artificial: una pieza clave en el mercado laboral

Esta tecnología desembarcó en el mercado laboral y transformó el concepto de trabajo propiamente dicho. Como toda transformación, la llegada de la Inteligencia Artificial al mundo del trabajo trajo consigo algunas ventajas y desventajas.

De acuerdo con la información del Instituto de Expertos Digitales de UNIR, Universidad española en Internet, “en 2019, el AI Now Institute publicó un informe en el que señalaba los posibles efectos negativos de la inteligencia artificial en la igualdad de oportunidades. Así, menciona los efectos nocivos de buscar que la inteligencia artificial gestione de forma autónoma los procesos de selección laboral basados en criterios como la edad, el sexo o la raza”. Es decir que a través de la IA los departamentos de Recursos Humanos pueden realizar la gestión de talentos para sus empresas, basados en parámetros que no siempre se ajustan a las necesidades del trabajador.

En esta línea, los expertos digitales coinciden en que el uso “imprudente” de la IA puede generar desigualdad dentro del mercado laboral. El periodista Héctor G. Barnés expuso en un artículo del portal El Confidencial que dicha desigualdad puede darse por la automatización de los procesos de selección y gestión de los recursos humanos, lo que genera “falta de representación, puestos específicos reservados a determinados perfiles, inestabilidad laboral o, incluso, una homogeneización del trabajo peligrosa para plantear desarrollos innovadores”.

Este uso de la IA por parte del área de recursos humanos se conoce como human analytics. De acuerdo con la información desarrollada en el libro “El trabajo en la era de los datos”, se trata del “uso de datos individualizados sobre personas para ayudar a directivos y a profesionales de Recursos Humanos a tomar decisiones en materia de contratación: seleccionar candidatos, evaluar a los trabajadores, considerar posibles ascensos, identificar cuándo hay riesgo de que las personas dejen su empleo y seleccionar futuros líderes. El análisis de recursos humanos se utiliza también para gestionar el rendimiento de los trabajadores”.

Este último punto es fundamental para las empresas en la actualidad. La evaluación del rendimiento es una realidad en los entornos laborales y, por este motivo, la Inteligencia Artificial tomó protagonismo. ¿Por qué lo hizo?  Phoebe V. Moore, de la Universidad de Leicester, asegura en su artículo “Inteligencia artificial en el entorno laboral. Desafíos para los trabajadores”, que en la toma de decisiones basadas en estos procesos, los trabajadores pueden manifestar inseguridad y descontento, debido a que no tienen acceso a los datos que recopila y utiliza la empresa para arribar a determinadas conclusiones.

“Si en los procesos de toma de decisiones basadas en algoritmos del análisis de recursos humanos y de la gestión del rendimiento no intervienen los humanos ni se tienen en cuenta los aspectos éticos, estas herramientas pueden exponer a los trabajadores a una serie de riesgos estructurales, físicos y psicosociales y provocarles estrés”, afirma Moore.

Otras intervenciones de la Inteligencia Artificial

Es muy probable que por lo menos una vez en su vida los usuarios de Internet hayan chateado para resolver algún inconveniente online con alguien que no es un humano. Se trata de los chatbots. En su artículo Moore los define como “otra herramienta mejorada con IA capaz de resolver un elevado porcentaje de consultas básicas propias de los servicios de atención al cliente”. De esta manera, los humanos que trabajan en este tipo de servicios pueden enfocarse en preguntas más complejas que requieran otro tipo de desarrollo, y que la automatización no puede prever. Los chatbots trabajan en colaboración con las personas no solo físicamente; también se implementan en el soporte de los sistemas para atender consultas telefónicas de los clientes.

En este sentido, tal como describe la experta de la Universidad de Leicester, “los chatbots plantean riesgos psicosociales relacionados con el temor a la pérdida del empleo. Se debería formar a los trabajadores para que conozcan el papel y la función de los bots en el espacio laboral y entiendan que les pueden aportar”. Dicha preocupación de los trabajadores parte de una premisa lógica: si un bot puede resolver las inquietudes de un humano, ¿qué haremos los otros humanos al respecto?

Por eso es importante la formación continua en “nuevas destrezas y entornos digitales”. ¿Qué significa esto? En palabras de los redactores de Edix: “el profesional del futuro será, ante todo, una persona que tendrá que afrontar una adaptación constante a nuevos entornos y desarrollos”. Por lo tanto, trabajar con bots, robots, y con inteligencia artificial, será algo con lo que en algún punto todos deben lidiar. “La inteligencia artificial es una herramienta más al servicio de los trabajadores. Ahora bien, es importante conocer sus implicaciones y desarrollar habilidades capaces de diseñar un futuro mejor.”

A su vez, los dispositivos wearables de seguimiento personal están cada vez más presentes en los lugares de trabajo. Se trata de “un dispositivo electrónico que se usa en el cuerpo humano y que interactúa con otros aparatos para transmitir o recoger algún tipo de datos”. El ejemplo más conocido de wearable son los relojes y las pulseras inteligentes. De acuerdo con los datos brindados en el artículo de Moore, “entre 2014 y 2019 se predijo un incremento de 13 millones de dispositivos de seguimiento de actividad en los entornos laborales. Esto ocurre en los almacenes y en las fábricas donde los GPS y las pulseras de identificación por radiofrecuencia o por sensores táctiles, sustituyeron por completo a los lápices y los portapapeles”.

Por otro lado, en los entornos laborales donde se utiliza la Inteligencia Artificial puede haber falta de comunicación. Según Moore esto ocurre “cuando los trabajadores no son capaces de asimilar la complejidad de la nueva tecnología lo suficientemente rápido, y en particular si además no reciben formación para enfrentarse a las amenazas que puedan surgir. Esto es un problema real en el ámbito de la pequeña empresa y de las startups, organizaciones bastante experimentales en el uso de las nuevas tecnologías, que no suelen tener en cuenta que es imprescindible garantizar las condiciones de seguridad antes de que ocurran los accidentes, y que a veces deciden actuar cuando el problema ya no tiene remedio”.

Tras analizar este panorama, todo parece indicar que el capital humano se verá seriamente afectado a largo plazo por la irrupción de la Inteligencia Artificial en el mercado laboral; de hecho, se afirma que “la sustitución de humanos por máquinas está llevando a muchas personas al desempleo a gran escala”.

Entonces, ¿cuáles son las ventajas de la Inteligencia Artificial en el mundo laboral? Una de ellas radica en la posibilidad de integrar los procesos de gestión y selección del personal. Desde UNIR afirman que “la clave es, precisamente, entender la IA como una herramienta al servicio de las personas y no las personas como una herramienta al servicio de la IA”.

La integración entre el mercado laboral y la inteligencia artificial no tiene por qué ser una experiencia traumática. ¿Cómo puede lograrse? Los especialistas dicen que es posible “partiendo de una ética digital y una profesionalización continua en los nuevos oficios digitales. La gestión del talento a partir de herramientas de IA puede crear un entorno cada vez mejor”.

Fuentes:

edix.com

bbvaopenmind.com