¿Qué funciones cumple una azafata o azafato bancario?

La azafata bancaria o azafato bancario es un profesional que se encarga de captar a los clientes de un banco y acompañarlos en el proceso de gestión de los trámites y/o las transacciones que estos necesiten realizar.

Sin duda, se espera que quien pueda cubrir la vacante de azafata o azafato bancario posea gran vocación de servicio, acompañada de buena presencia y buena dicción. Asimismo, el puesto requiere una personalidad entusiasta, con gran predisposición y con excelente nivel de comunicación y empatía. Además, tiene que tener un perfil dinámico, emprendedor, comprometido, y ganas de aprender.

Las responsabilidades de la azafata o azafato bancario son atender, orientar, asesorar y brindar ayuda de manera personalizada a los clientes del banco. También es responsable de ordenar y coordinar las filas que se puedan generar en los medios automáticos y, en algunos casos, su responsabilidad ascenderá a la recepción y gestión de reclamos.

El azafato o la azafata también tienen responsabilidades generales, como tener una buena presencia cumpliendo con el uso adecuado del uniforme que lo identifique como empleado del banco, cumplir con los días pactados y en el horario convenido, conocer sus tareas y funciones principales, y conocer los productos bancarios y el uso de todos los medios automáticos.

Asimismo, la azafata o azafato bancario tiene que tener diversas competencias y habilidades. El término competencia refiere a la capacidad real y medible de alguien para la puesta en práctica de una actividad concreta, es decir, una persona es competente cuando posee la capacidad, real y demostrada, para realizar con éxito una actividad de trabajo específico. Por su parte, la habilidad es la destreza, rapidez o facilidad que tiene una persona para realizar cualquier actividad, por lo que se puede decir que alguien es hábil cuando realiza una actividad de forma exitosa gracias a su destreza.

Cada puesto de trabajo demanda un conjunto de habilidades y competencias diferentes, y además, cada banco tiene su propio perfil de competencias determinado y deseado. Sin embargo, existen algunas que son las que más demanda el sector financiero y bancario.

Los bancos valoran las habilidades numéricas ligadas al conocimiento general de contabilidad, la habilidad para el manejo de las nuevas tecnologías, la habilidad de comunicación verbal y escrita orientada a la atención al cliente, la habilidad orientada a la resolución de conflicto y negociación, y la habilidad para las relaciones humanas.

En cuanto a las competencias requeridas para el puesto de azafata o azafato bancario, podemos detallar algunas competencias genéricas, por ejemplo, el aprendizaje continuo, el trabajo en equipo, la resolución de problemas, la adaptabilidad al cambio, y la pro actividad. En referencia a las competencias específicas, el puesto de azafata o azafato bancario requiere la escucha e interpretación de la solicitud del cliente de banco, el asesoramiento al cliente sobre el uso adecuado de los medios automáticos y canales de distribución, así como también la recepción, derivación y resolución de dudas o reclamos con base en la comunicación efectiva, la capacidad de análisis, y por último, autonomía, responsabilidad, amabilidad y honestidad.

A su vez, la azafata o azafato tiene que cumplir con diversas tareas, como responder a las preguntas de los clientes y explicar los servicios disponibles, como depósitos bancarios, obligaciones y valores; referir a los clientes al personal del banco apropiado para solucionar sus necesidades financieras; introducir en el tótem digital que otorga números, información sobre la cuenta para la correcta derivación; informar a clientes de los procedimientos para solicitar productos y servicios, como las tarjetas de débito, de crédito, uso del cajero automático, depósito directo de cheques o inversiones; investigar y corregir errores de los clientes; y asesorar, acompañar y realizar transacciones en los medios automáticos, ya sea cajeros, autoservicios, home banking, o banca telefónica.

Para poder realizar todas estas tareas, la azafata o azafato bancario dispone de una serie de herramientas de trabajo, como por ejemplo, los canales de distribución bancaria, es decir, el canal presencial, que es el banco, donde se asiste de manera tradicional al público, y el canal remoto y electrónico. También tiene en su poder la banca telefónica, ya que todos los bancos tienen a disposición del público un número de atención al cliente, y también la banca online, conocida como home banking, es decir, las plataformas virtuales para realizar una gran variedad de transacciones a las que se accede desde la computadora y en cualquier lugar con conexión a internet.

El puesto de azafata y azafato bancario tiene el objetivo de ayudar a todo aquel que se acerque al banco a realizar un trámite o una transacción. Su función principal es guiar a la personas para que su experiencia en la sucursal sea positiva y placentera, lo que derivará en que los usuarios no dejen de ser clientes dada la buena atención que reciben.