Cómo tener un ingreso pasivo propio

Una serie de economistas se plantearon, a raíz de estos profundos cambios, la necesidad de rever ciertos conceptos. Por ejemplo, llegaron a la conclusión de que era necesario revisar ciertos aspectos de la contabilidad tradicional, más tales como las nociones de "activo" y "pasivo". Ahora, se considera "activo" aquel bien que pone dinero en el tu bolsillo todos los meses, mientras que un "pasivo" es aquel que saca dinero del bolsillo todos los meses.
 
El economista Nicolás Litvinoff, en el diario La Nación, planteó el siguiente ejercicio para entender de qué se trata esto: imaginemos que uno cuenta con los ahorros suficientes (digamos 70.000 dólares) como para poder adquirir una casa propia. A partir de que uno concreta esa situación y se transforma en propietario, pasa a inmovilizar ese capital. Es cierto que uno deja de pagar un alquiler, pero de todos modos, hoy en día el valor de un alquiler no alcanza el 5% del valor del departamento; es decir, se retribuye con un 5% a quien inmoviliza el capital.
 
Si, por otro lado, a esos 70.000 dólares se los divide en dos mitades, se invierte la primera mitad en bonos y acciones preferentes de empresas de primera línea de EE.UU. (inversión segura y medianamente conservadora, en dólares y bajo legislación americana, totalmente legal para un argentino) es posible obtener un 6% anual. Paralelamente, la otra mitad del dinero se pasa a pesos y, por ejemplo, se hace una mezcla de inversiones entre plazos fijos (22% anual) y Lebac (37,50% anual), quedando invertido al 34% anual en pesos.
 
Comparemos: si uno alquilara, pagaría aproximadamente 300 dólares mensuales (obviamente variará en función de la ubicación, estado del departamento, etc.), algo así como 4500 pesos. Esos 4500 pesos es lo que uno se ahorraría si comprase el departamento.
 
Sin embargo, si uno invierte en función de lo mencionado anteriormente, el flujo de ingresos mensuales que se obtendrían sería de 2650 pesos por la inversión en dólares (175 dólares anuales) y de alrededor de 14.000 pesos mensuales por la inversión en plazos fijos y Lebac. El flujo total sería de 16.650 pesos mensuales (los US$ 35.000 se convierten en 507.500 pesos que invertidos al 33% generan 14.000 pesos mensuales que se suman al flujo en dólares) por una inversión que se encuentra diversificada en monedas. Deducido el costo del alquiler, esos 16.650 pesos se convierten en 12.150 pesos, pudiendo usar la mitad (6075 pesos) para gastos corrientes y la otra mitad para la compra de dólares todos los meses que serán guardados como "colchón de emergencia".
 
Para concluir, es posible decir, que en lugar de gastar 70.000 dólares para ahorrar 4500 pesos mensuales y tener un "techo propio", se invierte de manera inteligente ese mismo monto y se consigue lo necesario para afrontar el costo del alquiler, más 6075 pesos para cubrir costos fijos y variables y dólares de ahorro todos los meses.
 
Como se ve, la idea o eje central de poseer el "techo propio" podría comenzar a dejarse de lado y comenzar a pensar en el concepto de "ingreso pasivo propio". Con este tipo de pensamiento nuevo se pasa a cambiar la compra de un pasivo por la creación de un activo generador de ingresos.