Con el auge del cuidado del medio ambiente, la necesidad de disminuir costos y el avance de la tecnología, la logística inversa se torna más importante que nunca.
Una situación que sucede más de lo deseado es que cuando uno adquiere un producto a través de e-commerce, una vez que dicho producto llega a la puerta de nuestra casa, no estemos del todo satisfechos. O tal vez puede habernos sucedido lo mismo cuando adquirimos algún servicio que no nos convenció del todo y, pasado el período de prueba, decidimos regresarlo a la empresa que lo proveyó. Para el consumidor promedio, el problema finaliza ahí. Se devuelve el producto o servicio y listo. ¿Pero qué pasa con el producto en sí mismo?, ¿qué pasa en la logística de la empresa? De eso se trata la logística inversa.
Según la revista Mercado, una definición es que la logística inversa se encarga de recuperar y reciclar envases, embalajes y residuos peligrosos; así como de los procesos de retorno de excesos de inventario, devoluciones de clientes, productos obsoletos e inventarios estacionales. Incluso se adelanta al fin de vida del producto, con objeto de darle salida en mercados con mayor rotación.
Por lo tanto, las actividades incluidas dentro del concepto de logística inversa son varias y de distinta índole.
En base a estas actividades la clasificación por tipo de logística inversa realizada es: devoluciones y retornos, residuos o productos fuera de uso y aprovechamiento de capacidades.
Este concepto de logística inversa no se utiliza solo para hacer referencia al papel de la logística en la devolución del producto, sino que también se refiere a la reducción en origen, el reciclado, la reutilización de materiales, la sustitución de materiales, la eliminación de residuos y desperdicios, la reparación y a la remanufacturación.
La introducción de este término, es resultado de la creciente conciencia medioambiental en los países industrializados, que lleva a plantearse los problemas que tienen relación con la recolección de residuos y de productos o componentes usados y su reciclaje.
La globalización económica, la regulación y estandarización en la industria, el desarrollo de infraestructuras, los avances tecnológicos y la sostenibilidad del medio ambiente obligan a las empresas a replantearse la forma de hacer negocios, así como a buscar nuevos enfoques para mantener y ampliar su presencia en el mercado.
Por lo tanto, teniendo en cuenta todos los procesos, procedimientos y la introducción de una legislación medioambiental exigente que obliga a los fabricantes a efectuar un control de sus productos para elevar el nivel de protección del medio ambiente, surge la necesidad de implementar y difundir la logística Inversa: renovación, reciclaje y recogida de productos, envases y embalajes.
De hecho, la logística reversa está cada vez más presente en el mundo empresarial. En un entorno competitivo, muchas empresas se han dado cuenta de que el flujo inverso de las mercancías puede implicar una reducción significativa de costos.
Con respecto a nuestro país, se estima que de un 4% a un 6% de todos los productos de los retailers vuelven a las empresas por un motivo u otro, esto cuesta a las empresas a nivel global US$ 40 mil millones anuales. No es ninguna sorpresa entonces que la logística inversa también tenga presencia en el país.
La empresa de difusión satelital DirecTV, que vende equipos auto instalables de transmisión satelital, encontró en la logística inversa una herramienta que les permite recuperar los equipos de los clientes que se dan de baja, reciclarlos y volverlos a poner a disposición de la operación para que sean entregados a clientes nuevos. Actualmente la empresa recupera en promedio hasta 50.000 cajas por mes. El recupero representa un ahorro de casi el 50% frente a la producción de un equipo nuevo.
Pasos para implementar normas ISO
Duración: 16 hs. 
